Èramos Mentirosos - E. Lockhart

by - marzo 28, 2017


Titulo: Éramos mentirosos
Autor (a): E. Lockhart

Sinopsis:

Una isla privada. Una ilustre y conocida familia de Nueva Inglaterra. Un grupo de cuatro amigos —los Mentirosos— cuya amistad se vuelve destructiva. Una rebelión. Un accidente. Un secreto. Mentiras y más mentiras. Amor verdadero. Y, por fin, la verdad.

Esta es la bellísima y terrible historia de una familia perfecta que se sostiene sobre pilares de peligrosa fragilidad. A lo largo del relato se van desvelando las piezas de un rompecabezas que formarán un mosaico de personajes fascinante, donde los prejuicios y el egoísmo son los peores enemigos de la armonía y la felicidad.


Éramos mentirosos comienza con un descripción critica de  la familia Sinclair; en donde nuestra protagonista (Candace) nos dice que significa pertenecer a esta acaudalada familia.

Luego de su breve relato introductorio, la historia empieza a desarrollarse con una descripción personal de sí misma y de todos los sucesos que precedieron a aquel verano número quince. Candace relata como la partida de su padre les rompe el corazón a ella y a su madre (Penny), y de cómo mantuvieron su mentón en alto mientras él se alejaba como si todo aquello no les importase o doliese. 

«Sé normal, vamos —dijo—. Ahora mismo»«Porque lo eres. Porque puedes serlo».«No montes una escena —me dijo —. Respira e incorpórate».

Para los Sinclair la apariencia es de suma importancia, no importa que tan grandes sea las mentiras que digas si te hacen quedar bien. Luego de la partida de su padre, de quemar y botar todas sus cosas, Cady y su madre se van a la Isla Beechwood.

Es allí en donde la historia como tal empieza a desarrollarse.

El verano número ocho es el principio de todo; es cuando Gat se une a su mundo, y cuando Johnny, Mirren, Gat y Cady se convierten en los mentirosos (como la familia Sinclair les llama) de ahí en adelante los lazos afectivos van creciendo. El verano numero quince, es el detonante de todo los problemas y de allí se va la trama del libro.

Harris Sinclair siempre está poniendo a competir a sus hijas entre si, por quien lo quiere mas y por quien debería quedar con que cosa de la herencia. Ocho mese antes de aquel verano la abuela Tipper muere de un paro cardiaco y desde entonces las tres hijas (Carrie, Bess y Penny) se disputan porque pertenencia desean tener de ella; cabe destacar que ese verano numero quince es donde los problemas estallan.

Mientras tanto los mentirosos tratan de mantenerse fuera de las peleas y discusiones por la herencia. En esta parte es donde conocemos más a fondo a la familia Sinclair y nos damos de cuanta de que detrás de la fachada de familia perfecta hay una familia rota que se cae a pedazos y trata de mantenerse firme a pesar de las adversidades.

«¿Lo entiendes, Cady? El silencio es una capa protectora sobre el dolor»

También es cuando Cady y Gat tienen un breve romance de verano, Cady desde el verano pasado a estado enamorada de Gat pero en el verano numero quince,  cuando ella decide expresar su sentimientos se entera de que él tiene una novia y por eso ella se dispone a hacer de cuantas que nada está pasando entre ellos. El caso es, que en ese temible verano numero quince pasaron muchas más cosas de las que ella puede recordar y de las que los demás prefieren no hablar.

<<Recuerdo las caras tristes y grises de la tía Carrie, la tía Bess y el abuelo.>>

Candace Sinclair, tras el “accidente” tiene serias repercusiones como migrañas, vómitos y desmayos, que la dejan noqueada y le cuelan el cerebro; todo esto en consecuencia de aquel “misterioso accidente”. Para el verano numero dieciséis se va de viaje con su desaparecido padre por Europa, por lo que ese verano no va a la Isla Beechwood. Durante todo su viaje, se la pasa quejándose sobre las molestas migrañas y trata de ponerse en contacto con sus primos (Mirren y Johnny) y con Gat de quienes no sabe nada desde el verano numero quince, sin tener mucho existo.

El otoño después del accidente Cady comienza a regalar todas sus pertenencias, como auto castigo por lo sucedido. Ella no recuerda lo que sucedió ese verano o por lo menos lo más importante,  constantemente está preguntando a sus madre por lo sucedido pero siempre, lo olvida por lo que su médico decide que ella debe recordar conforme los recuerdo vayan volviendo. 

El verano numero diecisiete, cuando regresa a las Isla Beechwood se encuentra que la casa de los abuelos ha sido destruida y remplazada por la nueva Clairmont. También que la relación familiar entre las tías es más estrecha y parece que las peleas han acabo, y se han vuelto más cercanas. Cady se encuentra con sus mentirosos y pasa tiempo con ellos el Cuddledown (la casa de Bess, quien ahora vive con Harris en nueva Clairmont); poco a poco vamos desvelando los secretos de lo que sucedió ese verano numero quince, hasta conocer la cruda verdad y de cómo aquel misterioso accidente cambio la vida de la familia Sinclair, y “consumió” a más de uno. 

<<Siéntete triste, laméntalo… pero no cargues con ello.>>

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